El Alzheimer pertenece a ese grupo de enfermedades frecuentes de las que no se sabe la causa. Se conocen sus manifestaciones en el paciente, y en su cerebro: una acumulación de dos proteínas llamadas tau y beta-amiloides. Pero se ignora cómo se desencadena esa anormalidad.
Las personas con mala higiene o enfermedad de las encías oral pueden estar en un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer.
Investigadores noruegos han determinado, a través de una nueva investigación publicada en la revista Science Advances, que la gingivitis juega un papel decisivo en el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer.
"Descubrimos con pruebas basadas en el ADN que la bacteria que causa la gingivitis puede pasar de la boca al cerebro", explica el investigador Piotr Mydel, del Laboratorio de Investigación Broegelmanns en Departamento de Ciencia Clínica de la Universidad de Bergen (UiB).
La bacteria Porphyromonas gingivalis produce una proteína que destruye las células nerviosas en el cerebro, lo que a su vez conduce a la pérdida de la memoria y, en última instancia, al alzhéimer.
Mydel puntualiza que la bacteria no causa el alzhéimer por sí misma, pero su presencia aumenta sustancialmente el riesgo de desarrollar la enfermedad y también está implicada en una progresión más rápida de la misma.
Sin embargo, la buena noticia es que este estudio muestra que hay algunas cosas que se pueden hacer para disminuir el alzhéimer.
"Cepille sus dientes y use hilo dental", recomienda Mydel que agrega que es importante, si ya se tiene gingivitis y hay alguna persona con alzhéimer en la familia, acudir regularmente al dentista y limpiar los dientes adecuadamente. Los investigadores habían descubierto previamente que las bacterias que causan la gingivitis pueden pasar de la boca al cerebro, donde las enzimas dañinas que excretan pueden destruir las neuronas.
Ahora, por primera vez, Mydel tiene evidencia de ADN para este proceso en el cerebro humano. Mydel y sus colegas examinaron a 53 personas con alzhéimer y descubrieron la enzima en el 96% de los casos.
Según Mydel, este conocimiento brinda a los investigadores un posible nuevo enfoque para atacar la enfermedad de Alzheimer. "Hemos logrado desarrollar un medicamento que bloquea las enzimas dañinas de las bacterias, posponiendo el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer. Estamos planeando probar este medicamento este mismo año", anuncia Piotr Mydel.
La bacteria Porphyromonas gingivalis causa una infección crónica en las encías y alrededor del 50% de la población la porta de una forma u otra. Alrededor del 10% de ellos desarrollará una forma grave de la enfermedad. Esta bacteria está relacionada también con el reumatismo, la EPOC y el cáncer de esófago.
Sin embargo, en la periodontitis hay un doble efecto, la infección por las bacterias y el proceso inflamatorio. En la relación con la diabetes, y con las enfermedades cardiovasculares, prima la parte inflamatoria, mientras que en el caso del alzhéimer es más importante la parte bacteriana, ya que aunque las gingipaínas pueden viajar solas, lo más normal es que sea la bacteria la que se desplace.
Las personas con mala higiene o enfermedad de las encías oral pueden estar en un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer.
Investigadores noruegos han determinado, a través de una nueva investigación publicada en la revista Science Advances, que la gingivitis juega un papel decisivo en el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer.
"Descubrimos con pruebas basadas en el ADN que la bacteria que causa la gingivitis puede pasar de la boca al cerebro", explica el investigador Piotr Mydel, del Laboratorio de Investigación Broegelmanns en Departamento de Ciencia Clínica de la Universidad de Bergen (UiB).
La bacteria Porphyromonas gingivalis produce una proteína que destruye las células nerviosas en el cerebro, lo que a su vez conduce a la pérdida de la memoria y, en última instancia, al alzhéimer.
Mydel puntualiza que la bacteria no causa el alzhéimer por sí misma, pero su presencia aumenta sustancialmente el riesgo de desarrollar la enfermedad y también está implicada en una progresión más rápida de la misma.
Sin embargo, la buena noticia es que este estudio muestra que hay algunas cosas que se pueden hacer para disminuir el alzhéimer.
"Cepille sus dientes y use hilo dental", recomienda Mydel que agrega que es importante, si ya se tiene gingivitis y hay alguna persona con alzhéimer en la familia, acudir regularmente al dentista y limpiar los dientes adecuadamente. Los investigadores habían descubierto previamente que las bacterias que causan la gingivitis pueden pasar de la boca al cerebro, donde las enzimas dañinas que excretan pueden destruir las neuronas.
Ahora, por primera vez, Mydel tiene evidencia de ADN para este proceso en el cerebro humano. Mydel y sus colegas examinaron a 53 personas con alzhéimer y descubrieron la enzima en el 96% de los casos.
Según Mydel, este conocimiento brinda a los investigadores un posible nuevo enfoque para atacar la enfermedad de Alzheimer. "Hemos logrado desarrollar un medicamento que bloquea las enzimas dañinas de las bacterias, posponiendo el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer. Estamos planeando probar este medicamento este mismo año", anuncia Piotr Mydel.
La bacteria Porphyromonas gingivalis causa una infección crónica en las encías y alrededor del 50% de la población la porta de una forma u otra. Alrededor del 10% de ellos desarrollará una forma grave de la enfermedad. Esta bacteria está relacionada también con el reumatismo, la EPOC y el cáncer de esófago.
Salud bucal y salud general
Esta relación entre la placa bacteriana y el cerebro es una manifestación más del impacto de los microorganismos y la salud de las personas que los alberga. Igual que la microbiota intestinal se relaciona con numerosas enfermedades, la de la boca se asocia a dolencias que van desde la diabetes a las cardiovasculares.Sin embargo, en la periodontitis hay un doble efecto, la infección por las bacterias y el proceso inflamatorio. En la relación con la diabetes, y con las enfermedades cardiovasculares, prima la parte inflamatoria, mientras que en el caso del alzhéimer es más importante la parte bacteriana, ya que aunque las gingipaínas pueden viajar solas, lo más normal es que sea la bacteria la que se desplace.